De once años de Hattingen Dies: Tragic End of a Internet Challenge!
Un estudiante de once años murió después de la inhalación de Deospray en Hattingen, posiblemente debido al peligroso "desafío de desodorante".

De once años de Hattingen Dies: Tragic End of a Internet Challenge!
Un trágico incidente en Hattingen arroja una luz de habilidad sobre los peligros asociados con los riesgos y los desafíos en línea. Una niña de once años murió después de inhalar a Deospray, como confirmó la policía en Ennepetal. Los informes toxicológicos han demostrado claramente que el aerosol fue la causa de la muerte. No está claro si la niña fue seguida por un "desafío de desodorante" correspondiente, que se extiende en las redes sociales, especialmente en Tikok. Este desafío alienta a los jóvenes a respirar en Deospray, lo que puede tener consecuencias fatales.
Después de que el caso se conoció, tanto las autoridades como los expertos han preocupado por tales tendencias arriesgadas. El Instituto Federal Alemán para la Evaluación de Riesgos insta a la inhalación de los deosprays, ya que esto puede conducir a la inconsciencia, la parálisis respiratoria o incluso el paro cardíaco. La autoridad enfatiza que tales muestras de prueba son amenazantes de la vida y, por lo tanto, no deben ser imitadas. Esto también plantea preguntas sobre la responsabilidad de las plataformas de redes sociales, los padres e instituciones educativas para tratar con fenómenos peligrosos de Internet.
Los peligros de las redes sociales
Según los estudios actuales, más del 80 % de los jóvenes en Alemania usan las redes sociales diariamente y pasan 3.5 horas en línea. Este uso intensivo está en una conexión preocupante con el estrés psicológico, especialmente en niños y adolescentes. Por lo tanto, los políticos y los expertos exigen límites de edad para el uso de las redes sociales para garantizar la seguridad de los adolescentes. La Academia Nacional de Ciencias Leopoldina suplica la introducción de los límites de edad y una mejor regulación de las redes sociales. Sugiere que no se deben permitir ninguna cuenta de redes sociales para niños menores de 13 años, mientras que a partir de los 13 años se debe permitir usar bajo la supervisión de los padres.
El aumento en el uso de las redes sociales es particularmente alarmante en los niños más pequeños. Por ejemplo, los datos muestran que el 10 % de Tikok de 6 a 7 años y el 71 % de los jóvenes de 12 a 13 años están activamente en las redes sociales. La ciencia advierte sobre las consecuencias psicológicas de tal uso, como la depresión, la ansiedad y los trastornos del sueño. Por lo tanto, las medidas políticas para la clara regulación y el control de las redes sociales son urgentemente necesarias.
Llamada al responsable
La trágica historia de la niña de once años debe servir como un llamado de vigilia para todos los involucrados. Los padres, las escuelas y los operadores de las redes sociales tienen la responsabilidad común de garantizar que los niños y los adolescentes estén protegidos de tendencias tan peligrosas. La necesidad de promover la capacitación apropiada para la edad en la alfabetización mediática es tan importante como la demanda de una regulación efectiva de estas plataformas para garantizar la seguridad de los usuarios.
En vista del número creciente de niños que usan las redes sociales, todos debemos trabajar juntos para minimizar los riesgos y crear un entorno seguro para la próxima generación. En la discusión actual, los expertos e iniciativas comentan esto para encontrar soluciones sostenibles.
El incidente no solo planteó preguntas sobre la seguridad de los usuarios jóvenes, sino que también reavivó la discusión sobre la responsabilidad de las plataformas de redes sociales. Una mayor conciencia de los peligros y el uso responsable de los medios son esenciales.
Para obtener más información sobre el incidente en Hattingen, lea vol.at y stern.de. Puede encontrar información sobre el uso de las redes sociales para niños en Tagesschau.de.