Trump domina la histórica cumbre entre Japón y Corea del Sur
Histórico: el presidente surcoreano Lee y el primer ministro japonés Ishiba anuncian una nueva era de cooperación. Sin embargo, la influencia de Trump en la diplomacia bilateral sigue siendo notable.

Trump domina la histórica cumbre entre Japón y Corea del Sur
Tokio, Japón — La semana pasada se hizo historia. El presidente surcoreano, Lee Jae-myung, realizó su primer viaje al extranjero para mantener conversaciones bilaterales. Sin embargo, en lugar de viajar primero a Estados Unidos como sus predecesores, Japón, el antiguo maestro colonial, fue su primer destino. Esto representa un cambio notable en la orientación diplomática de Corea del Sur.
Un punto de inflexión en las relaciones
Después de una cumbre entre Lee y el primer ministro japonés Shigeru Ishiba, Tokio y Seúl emitieron su primera declaración conjunta en 17 años prometiendo una cooperación más profunda en inteligencia artificial, comercio y desnuclearización de la península de Corea. También anunciaron la creación de un grupo de trabajo conjunto para abordar desafíos como el envejecimiento de la población y la disminución de las tasas de natalidad.
Un signo de amistad
Lo que llamó especialmente la atención no sólo fue el contenido de los acuerdos, sino también el ambiente amistoso entre los dos Jefes de Estado. "Esta es nuestra segunda reunión y siento que somos amigos cercanos", dijo Lee sobre su homólogo japonés. Este giro positivo de la enemistad a la amistad no puede pasarse por alto y podría tener el potencial de cambiar permanentemente la relación entre los dos países.
Las sombras de la historia
La ocupación colonial japonesa de Corea, que duró más de tres décadas en la primera mitad del siglo XX, ha influido durante mucho tiempo en las relaciones entre los dos países. En 2023, Lee criticó a su predecesor por asistir a una cumbre histórica con Japón, llamándolo “títere de Tokio”. Sin embargo, desde que asumió el cargo hace dos meses, Lee ha adoptado una postura más pragmática y calificó a Japón como un "socio indispensable" para el crecimiento económico el 15 de agosto, el Día de la Liberación de Corea del Sur del dominio japonés.
Perspectivas de la situación geopolítica
Este último acercamiento no es sólo una cuestión diplomática, sino que también refleja la cambiante situación geopolítica en el Pacífico Occidental. Ambos países ahora enfrentan una relación más volátil con Washington, particularmente dada la errática política exterior del presidente estadounidense Donald Trump. Sus aranceles comerciales y sus llamados a aumentar el gasto en defensa han dañado alianzas alguna vez estables y han puesto a prueba la alianza alguna vez "férrea" entre Corea del Sur y Estados Unidos.
Preocupaciones de seguridad y desafíos económicos
La incertidumbre sobre las garantías de seguridad de Estados Unidos es una cuestión central. "Después de la traición en Ucrania, muchos aliados estadounidenses se preguntan qué significa realmente una garantía de seguridad estadounidense", dijo Jeffrey Kingston, profesor de estudios asiáticos en la Universidad de Tokio. En Japón, la invasión rusa de Ucrania a menudo se percibe como una advertencia. Corea del Sur y Japón también temen las crecientes capacidades nucleares de Corea del Norte y sus crecientes vínculos con Rusia.
Conclusión: Un nuevo comienzo en las relaciones bilaterales
Ambos países también deben gestionar cuidadosamente las relaciones con China, el principal socio comercial de ambas naciones. A pesar de los desafíos, se debe mantener el nuevo espíritu de cooperación, especialmente cuando Ishiba tenga que dimitir debido a dificultades políticas. La continuación de este desarrollo positivo depende de los sucesores que deberían promover aún más la nueva relación entre Japón y Corea del Sur.