China planea medidas para impulsar el crecimiento económico en 2025
China planea una expansión selectiva de las medidas económicas en 2025 con una política monetaria “apropiadamente flexible” y estrategias fiscales proactivas para impulsar el crecimiento.

China planea medidas para impulsar el crecimiento económico en 2025
China está planeando una política monetaria "razonablemente flexible" el próximo año, complementada con una política fiscal proactiva, para impulsar el crecimiento económico. Así lo informaron los medios estatales el lunes citando al Politburó del Partido Comunista.
Centrarse en la demanda y el consumo internos.
China apunta a expandir la demanda interna y aumentar el consumo, informó Xinhua. Estas declaraciones se hicieron antes de la próxima Conferencia Económica Central, en la que se espera que se establezcan objetivos fundamentales e intenciones políticas para el próximo año.
Reacciones del mercado tras los anuncios
Los mercados bursátiles reaccionaron positivamente al anuncio del Politburó y los bonos gubernamentales chinos experimentaron un repunte. El índice Hang Seng de Hong Kong subió un 2,8%, alcanzando su nivel más alto en un mes.
Marco político para 2025
Según Xinhua, en 2025 el gobierno debe adherirse al principio de "avanzar manteniendo la estabilidad". El informe enfatiza que se debe implementar una política fiscal proactiva y una política monetaria adecuadamente acomodaticia para mejorar el conjunto de herramientas de políticas y fortalecer los ajustes anticíclicos excepcionales. Además, se pretende estabilizar el mercado inmobiliario y el mercado de valores, aunque no se ha facilitado información detallada.
Ajustes importantes en la política monetaria
La actual reevaluación de la política monetaria representa la primera flexibilización desde finales de 2010. "Interpretamos esto como un fuerte estímulo fiscal, grandes recortes de las tasas de interés y compras de activos en 2025", dijo Xing Zhaopeng, analista senior de China en ANZ. "La trayectoria política muestra una fuerte confianza en las amenazas de Trump" que podrían implicar aranceles.
Desafíos de la economía china
Este año, la economía china ha tenido dificultades debido a una importante presión política y una política monetaria más agresiva por parte del banco central. En septiembre se anunció la mayor flexibilización monetaria desde la pandemia para estimular la economía mediante la reducción de las tasas de interés y la inyección de 1 billón de yuanes (alrededor de 140 mil millones de dólares) en el sistema financiero.
Objetivos de crecimiento y riesgos geopolíticos
Se cree que China podría alcanzar el objetivo de crecimiento de alrededor del 5% este año. Sin embargo, mantener esta tasa de crecimiento en 2025 podría ser difícil, especialmente con el regreso a la Casa Blanca del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha amenazado con aranceles del 60% o más a las importaciones chinas.
Retos estructurales y recomendaciones
La economía de China ha dependido en gran medida de la manufactura y las exportaciones este año, mientras que el desempeño del lado de la demanda ha sido decepcionante. La demanda de los hogares está sufriendo enormemente debido a una grave crisis inmobiliaria que está agotando la riqueza de los consumidores. Los economistas recomiendan que el gobierno deje el crecimiento sin cambios la próxima vez y al mismo tiempo proporcione un estímulo fiscal más contundente para contrarrestar el impacto de los aranceles estadounidenses esperados y aliviar las presiones deflacionarias.
Las amenazas de los aranceles de Trump han sacudido el complejo industrial de China, que vende bienes por valor de más de 400 mil millones de dólares a Estados Unidos anualmente. El Ministro de Finanzas de China, Lan Foan, dijo que se estaban planeando más medidas de estímulo, pero no dio detalles. También sugirió que Beijing debería adoptar políticas más centradas en el consumidor y ofrecer mayor apoyo financiero a los hogares de bajos ingresos, mientras sigue adelante con los cambios impositivos, sociales y de otras políticas previamente anunciados para abordar los problemas estructurales.
Hasta ahora, sin embargo, el gobierno chino se ha centrado principalmente en modernizar su sector manufacturero dependiente de las exportaciones, lo que ha logrado éxitos notables en vehículos eléctricos, energía solar y baterías, pero ha provocado la oposición de socios comerciales clave.