Muerte de un niño de 12 años: Fiscal de Texas pide pena de muerte para migrantes
Un fiscal de Texas busca la pena de muerte para dos venezolanos que asesinaron a un niño de 12 años. El caso está polarizando dentro de la campaña electoral de 2024.

Muerte de un niño de 12 años: Fiscal de Texas pide pena de muerte para migrantes
Los peces gordos están desplegando sus armas en el estado de Texas: la fiscal Kim Ogg ha anunciado que pedirá la pena de muerte contra dos venezolanos acusados de secuestrar, abusar sexualmente y asesinar a Jocelyn Nungaray, de 12 años. Este horrible acto ocurrió en junio de 2024 y rápidamente se convirtió en un tema central en el debate sobre la política de inmigración de Estados Unidos, particularmente durante las campañas electorales presidenciales. Ogg describió el asesinato como “tan vil, brutal y sin sentido como cualquier otro acto durante mi mandato”. Según informes de Al Jazeera, los dos sospechosos, Johan José Martínez-Rangel, de 22 años, y Franklin José Peña Ramos, de 26, ingresaron ilegalmente a Estados Unidos y anteriormente fueron detenidos brevemente por la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, pero fueron liberados.
La historia de fondo importante es que este tema fue utilizado por muchos republicanos, incluido el presidente entrante Donald Trump, para abogar por controles más estrictos en la frontera. Trump explotó la tragedia de la madre de Jocelyn, Alexis Nungaray, como parte de su campaña por un "Estados Unidos más seguro". En su campaña, pidió que se imponga la pena de muerte a los inmigrantes que maten a estadounidenses. Esta retórica ha influido mucho en el debate sobre la política de inmigración, particularmente porque los republicanos han tratado de establecer un vínculo entre la inmigración ilegal y los delitos violentos, como lo destacaron las noticias de última hora de AP News.
Caso penal y reacciones políticas.
El caso no sólo ha ejercido presión sobre el gobierno sino que también ha criticado duramente las políticas de inmigración del presidente Joe Biden. Si bien el Partido Republicano se ha centrado en gran medida en este incidente para resaltar una ola de delitos percibidos por inmigrantes, varios estudios muestran que los inmigrantes generalmente tienen menos probabilidades de cometer delitos que los ciudadanos natos. Sin embargo, la retórica política sigue sin cambios y seguirá utilizándose como arsenal en las próximas elecciones. El asesinato de Jocelyn Nungaray se ha convertido en un símbolo de la demanda de normas de inmigración más consistentes.
Los dos sospechosos están detenidos con una fianza de 10 millones de dólares y ahora se encuentran en el centro de un juicio cuyo resultado podría tener consecuencias tanto legales como sociales. Si bien Ogg debate acaloradamente este tema como fiscal de distrito en ejercicio, la responsabilidad del caso pronto pasará al nuevo fiscal de distrito Sean Teare, ya que Ogg no fue reelegido en las últimas elecciones de noviembre.