El destino de las mujeres yazidíes: fuga, trauma y nuevos comienzos en Bad Saarow
En Bad Saarow, las mujeres yazidíes encontraron refugio tras la violencia del EI. Decir adiós a su proyecto de ayuda supone un nuevo comienzo.
El destino de las mujeres yazidíes: fuga, trauma y nuevos comienzos en Bad Saarow
El impactante destino de las mujeres yazidíes en Alemania quedará especialmente claro el martes 26 de diciembre de 2024, cuando la despedida de un proyecto de ayuda en Bad Saarow marque el fin del apoyo excepcional a las supervivientes de los crímenes del EI. Después de años de esclavitud y violencia, alrededor de 60 mujeres yazidíes encontraron protección aquí y ahora están tratando de comenzar una nueva vida. Cómo informes rbb24, estas mujeres han soportado experiencias horribles que van desde la violación hasta el secuestro. Natali cuenta cómo fue vendida por combatientes del EI cuando tenía 14 años y abusada como esclava sexual durante años. A pesar de estas experiencias traumáticas, muestra una fuerza impresionante y la voluntad de aprender un nuevo idioma y formar una familia.
Otra superviviente, Zeri, fue vendida varias veces durante su cautiverio y luchó por la vida de su hijo recién nacido, que le fue arrebatado después de nacer. Sus conmovedoras historias resaltan la brutalidad que los yazidíes han sufrido a manos del reinado de terror de ISIS desde el 3 de agosto de 2014. Cada año, miles de yazidíes pierden la vida o resultan heridos. s-j-a.org informó. El genocidio, que exterminó sistemáticamente a mujeres y niños de sus comunidades, provocó que muchos huyeran. Hoy en día, más de 200.000 yazidíes viven en Alemania, una de las comunidades de diáspora más grandes del mundo.
Adiós a Bad Saarow
El proyecto de apoyo a los yazidíes en Bad Saarow finaliza después de más de cuatro años, sin posibilidad de prórroga. Las mujeres aquí han encontrado formas de superar el trauma y trataron de construir una nueva vida para sí mismas. Gracias al apoyo psicológico y al esfuerzo conjunto, han logrado lo inimaginable: ahora viven en diferentes ciudades de Alemania y han logrado la independencia. “Estoy agradecida por la libertad que tengo aquí”, dice Zeri y cuenta su deseo de quedarse en Alemania. Muchas mujeres han perdido a sus familias, pero ahora cuidan de sus hijos y así adquieren una nueva identidad, caracterizada por la voluntad de sobrevivir y la esperanza, como informó rbb24.