Mercados navideños de Viena: comparación de los precios de los ponches: ¡lo que necesita saber!
¡Viva la romántica prueba del puñetazo "Krone" en el pueblo navideño de Maria-Theresien-Platz en Viena!

Mercados navideños de Viena: comparación de los precios de los ponches: ¡lo que necesita saber!
¡La temporada navideña ha comenzado en Viena y la ciudad está llena de espíritu festivo! Desde principios de noviembre están abiertos los primeros mercados de Adviento y Navidad y en sus alrededor de 800 puestos todo gira en torno a las populares bebidas calientes, como el ponche y el vino caliente. Especialmente en el pueblo navideño de Maria-Theresien-Platz, que se encuentra entre los museos de arte y de historia natural, el ambiente mágico se realza con alrededor de 70 puestos que presentan artesanía rústica y adornos navideños hechos a mano. El Prueba de punzonado “Krone” Sin embargo, también ha revelado los elevados precios de las bebidas calientes: ¡un ponche de ron cuesta 6 euros, mientras que el ponche de pino cuesta 7 euros!
Los precios del ponche y del vino caliente se han mantenido este año prácticamente estables en comparación con el año pasado. En Maria-Theresien-Platz el precio del ponche o del vino caliente es de 5,40 euros y la versión sin alcohol cuesta 4,50 euros. El depósito por taza también sigue siendo el mismo: 5 euros, que se aplica de manera uniforme en toda Viena. Alto Mi Distrito En el Christkindlmarkt de Spittelberg el ponche y el vino caliente alcanzan precios de 4,80 euros, mientras que en Rathausplatz el ponche más barato se consigue por sólo 4 euros.
Popularidad y selección de bebidas.
Especialmente en las primeras semanas de noviembre, los vieneses pusieron a prueba los puestos de ponche hasta el cansancio. La variedad abarca desde variantes tradicionales hasta nuevas creaciones creativas como el ponche de strudel de manzana Lillet por 6,90 euros. Los clientes informaron de largas colas en Maria-Theresien-Platz debido al número limitado de puestos de comida. En muchos lugares, los primeros mercados son muy populares entre los turistas, lo que alimenta aún más el ambiente general de la ciudad. Mujeres como Sabine y Doris, que viajan cada año desde Suiza, hablan maravillas de su experiencia de compra y de las deliciosas bebidas, aunque se sorprenden con los precios.