Coches eléctricos: ¡Nuevos estudios revelan sorpresas con el polvo fino!
Un estudio muestra que los coches eléctricos producen más partículas de lo esperado. Se discuten los impactos ambientales y de salud.
Coches eléctricos: ¡Nuevos estudios revelan sorpresas con el polvo fino!
El debate sobre las emisiones de polvo fino y sus fuentes está adquiriendo cada vez más importancia en la política, la industria y la ciencia. Los coches eléctricos en particular están en el centro de atención, ya que nuevos estudios muestran que su impacto en la calidad del aire puede ser mayor de lo que se pensaba anteriormente.
Un estudio de Emissions Analytics ha demostrado que los coches eléctricos provocan un desgaste de neumáticos significativamente mayor debido a su mayor peso. El estudio estima que el desgaste de los neumáticos de los vehículos eléctricos produce niveles de partículas 1.850 veces mayores que los gases de escape de los motores de combustión convencionales. Estos resultados plantean dudas, ya que otros estudios, como los de Michelin, también indican que las emisiones de partículas de los coches eléctricos son entre un 10 y un 25 por ciento más altas que las de los motores de combustión.
Aumento de las emisiones de material particulado de vehículos pesados
En particular, los coches eléctricos más pesados, con una autonomía de unos 500 km, muestran una menor disminución de las emisiones de PM10. Aquí se observa un posible aumento de las emisiones de PM2,5 de entre el 3 y el 8 por ciento. Un estudio de la OCDE de 2020 encontró que los automóviles eléctricos más livianos producen entre un 11 y un 13 por ciento menos de PM2,5 y entre un 18 y un 19 por ciento menos de emisiones de PM10 que sus homólogos con motor de combustión.
A pesar de las ventajas de los vehículos eléctricos ligeros, la evidencia muestra que el creciente número de automóviles eléctricos conducirá a una reducción mínima de las emisiones de partículas del transporte por carretera, incluso si entre el 4 y el 8 por ciento de estos vehículos estén en uso para 2030. La reducción esperada será solo entre el 0,3 y el 0,8 por ciento.
Además, este informe Periódico del sur de Alemania sobre el problema de los microplásticos y el polvo fino que resultan del desgaste de neumáticos y frenos. Este tipo de polvo fino se está convirtiendo cada vez más en la mayor fuente de microplásticos en el medio ambiente: una cuarta parte de los microplásticos que llegan a los océanos del mundo se debe al desgaste de los neumáticos. En Alemania, el desgaste de neumáticos se estima en más de 150.000 toneladas al año.
Las investigaciones muestran que el desgaste de los neumáticos se produce especialmente en los cruces con semáforos y en las curvas, a veces hasta siete veces más que en las carreteras rectas. Se encontraron toxinas en la abrasión de los neumáticos que son potencialmente responsables de la muerte de peces. Para abordar estos desafíos, fabricantes de neumáticos como Continental, BMW y Michelin están desarrollando productos más sostenibles, mientras que proyectos como “Urban Filter” buscan soluciones para minimizar el desgaste de los neumáticos.
En resumen, está claro que las emisiones de polvo fino de los coches eléctricos y el consiguiente contenido de microplásticos en el medio ambiente son un problema grave. Los esfuerzos para mejorar la situación son complejos y requieren más investigación y acción.
– Presentado por Medios oeste-este