Alerta roja: ¡la ayuda social de Viena se enfrenta a recortes drásticos!
Los Verdes vieneses advierten de recortes drásticos en el sector social que ponen en peligro la estabilidad social. Se requieren medidas urgentes.

Alerta roja: ¡la ayuda social de Viena se enfrenta a recortes drásticos!
Viena se enfrenta a una crisis social provocada por recortes masivos en los servicios sociales. Los Verdes de Viena expresan su seria preocupación por los recortes financieros previstos, que podrían amenazar la estructura social de la ciudad. La concejal no ejecutiva Judith Pühringer critica los efectos de los recortes en las organizaciones afectadas y pide un debate transparente sobre los fondos necesarios para las ofertas de asistencia social. En las últimas semanas, organizaciones del sector social han hecho llamados desesperados y denunciado preocupaciones existenciales. En total, los recortes en el Fondo Social de Viena (FSW) podrían ascender a entre 200 y 300 millones de euros, lo que representa un alarmante 15 % en este sector, según los Verdes de Viena(https://wien.gruene.at/news/social-justice/alarmstufe-rot-das-sociale-wien-in-aufruhr/).
Esta situación es particularmente dramática en el centro de la ciudad. El presupuesto de FSW para 2025 ya tiene un déficit de financiación de 44 millones de euros, lo que pone en duda el trabajo diario de muchas instituciones sociales. Las iniciativas de programas destinadas a ayudar a las personas con discapacidades y a quienes luchan contra la adicción corren un grave riesgo. Esto podría hacer que a los afectados les resulte más difícil volver a una vida normal, al tiempo que se teme que aumenten los costes para el sistema sanitario y social. David Ellensohn, portavoz social del ayuntamiento, subraya los desafíos que plantea la asistencia sanitaria: la falta de recursos económicos empeora las condiciones laborales y reduce la dotación de personal en los centros asistenciales.
Alerta roja
Los cambios radicales en el sector social han generado preocupación entre muchas organizaciones. Los 44 millones de euros ya citados no sólo faltan en el presupuesto del FSW, sino que también son signos de problemas más profundos en el sistema. El apoyo al mercado laboral, un pilar central para la integración social, se está reduciendo significativamente. Los programas para que las personas que sufren adicción vuelvan al trabajo también están en riesgo. El cierre de los centros de día para estos clientes podría convertirse en una realidad en un futuro próximo, lo que provocaría un aumento de la necesidad de medidas de seguridad, como informa Tagesschau.
La incertidumbre que generan estos recortes afecta no sólo a los colectivos afectados, sino también a los empleados de instituciones sociales. Debido a las limitaciones financieras, cada vez se contratan menos especialistas bien capacitados. El riesgo de que se pierdan conocimientos valiosos debido a los despidos es cada vez mayor. La presión sobre el gobierno de la ciudad para que proporcione información clara sobre el monto y el alcance de los recortes está aumentando, pero no hay discusión política sobre las medidas presupuestarias.
El papel del gobierno federal
En un clima similar, las asociaciones sociales alemanas también hacen sonar la alarma. Los recortes en el presupuesto federal y la amenaza de políticas de austeridad suponen una amenaza para la infraestructura social. Una encuesta realizada a 8.300 instituciones muestra que dos tercios tuvieron que limitar o suspender sus ofertas. Caritas, en particular, advierte de la pérdida de redes sociales esenciales, mientras que Diakonie califica los drásticos recortes de poner en peligro la democracia. También en este caso la presión financiera sobre las instituciones sociales es inmensa, lo que pone en peligro no sólo las ofertas sociales, sino también el compromiso voluntario local, como los Verdes de Viena y Tagesschau lo explica detalladamente.
Para mitigar los efectos de los recortes en Viena y más allá, los Verdes han anunciado una solicitud urgente al alcalde Michael Ludwig para la próxima reunión del consejo municipal. Es hora de que el gobierno de la ciudad asuma la responsabilidad de garantizar la seguridad social de los ciudadanos y proporcione los recursos necesarios para un apoyo social integral.