Más de 300 muertos en combates en Siria desde el jueves
Los combates en Siria se han cobrado más de 300 vidas desde el jueves, dijo un grupo de seguimiento. La violencia entre las fuerzas gubernamentales y los partidarios de Assad está aumentando a medida que aumentan las preocupaciones internacionales.
Más de 300 muertos en combates en Siria desde el jueves
Al menos 311 personas han muerto en Siria desde el jueves en enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad del gobierno y partidarios del derrocado ex presidente Bashar al-Assad. Pero el número real de muertos podría ser “significativamente mayor”, según un grupo de seguimiento.
Mortal resultado de los enfrentamientos
Según el grupo de vigilancia independiente británico Red Siria para los Derechos Humanos (SNHR), las fuerzas gubernamentales han matado al menos a 164 civiles, entre ellos siete niños y 13 mujeres, desde el inicio de una operación de seguridad a gran escala en decenas de aldeas de las zonas rurales de Latakia, Tartous y Hama. Mientras tanto, los militantes leales a Assad mataron a otras 147 personas: 26 civiles y 121 miembros del personal de seguridad, dijo el director de SNHR, Fadel Abdul Ghani.
"Esperamos que el número de muertos sea significativamente mayor", añadió Ghani. CNN no puede verificar de forma independiente las cifras de SNHR y se ha puesto en contacto con el gobierno sirio para comentar sobre el número de muertos.
Horrible escalada de violencia
Los enfrentamientos en curso representan el peor estallido de violencia desde que Assad fue derrocado en diciembre por islamistas suníes que buscaban remodelar el orden político y sectario del país. Ahmad al-Sharaa, presidente interino de Siria, prometió en un discurso televisado el viernes por la noche responsabilizar a los responsables del asesinato de las fuerzas de seguridad del gobierno. Pero también pidió a sus fuerzas de seguridad que "garanticen que no haya respuestas excesivas o injustificadas" después de que surgieran informes sobre un elevado número de víctimas civiles.
Desafíos para el nuevo régimen
El Ministerio de Información sirio dijo a CNN el sábado que "los restos de Bashar" también habían arrestado a unos 300 funcionarios del gobierno y que "decenas" más estaban desaparecidos. El reciente aumento de la violencia pone de relieve los desafíos que enfrenta el nuevo régimen en Siria, particularmente para tranquilizar a los grupos desfavorecidos que están fuertemente armados. Latakia y Tartous, en la costa mediterránea, son regiones donde el apoyo entre los alauitas sirios a Assad ha sido fuerte. Los alauitas, que representan alrededor del 10% de la población, desempeñaron un papel importante en el régimen de Assad y, si bien muchos de ellos han depuesto las armas desde diciembre, muchos otros no lo han hecho.
Preocupación internacional por la situación
El sábado, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) expresó su grave preocupación por los informes sobre el elevado número de muertos y heridos en las dos provincias. Pidió a ambas partes "tratar a los prisioneros humanamente y con dignidad" y proteger la infraestructura sanitaria y el suministro de agua y electricidad. El secretario general de la ONU, António Guterres, condenó el viernes toda la violencia en Siria y pidió a las partes que protejan a los civiles y pongan fin a las hostilidades. Expresó preocupación por el riesgo de una escalada de tensiones entre comunidades en Siria en un momento en que la reconciliación y una transición política pacífica deberían ser una prioridad.
La guerra en Siria
La guerra civil de Siria comenzó como un levantamiento pacífico contra Assad durante la Primavera Árabe en 2011. Según las Naciones Unidas, el conflicto costó más de 300.000 vidas en la primera década y dejó al país profundamente dividido.