Ataques de osos en Eslovaquia: ¡el gobierno planea medidas drásticas!
Un ataque de oso en Eslovaquia lleva a la búsqueda de la madre: el gobierno planea matar 350 osos pardos por razones de seguridad pública.

Ataques de osos en Eslovaquia: ¡el gobierno planea medidas drásticas!
Los conflictos entre humanos y osos están aumentando en Eslovaquia, lo que ha provocado un aumento significativo de los ataques de osos. Precisamente hoy, 24 de mayo de 2025, un hombre fue atacado por un oso mientras caminaba y tuvo que ser tratado en el hospital. Estos incidentes preocupan a la población, especialmente en regiones como la ciudad de Liptovsky Mikulas, en el norte de Eslovaquia, donde cinco personas ya han recibido tratamiento médico tras ataques similares. Por ello, las autoridades locales han movilizado un equipo de operaciones especiales y cazadores para encontrar una madre osa que podría ser responsable del ataque. La búsqueda se realiza mediante drones y cámaras termográficas. La administración local ha pedido a la población que evite por el momento el entorno de la zona de la empresa afectada. Según el periódico Kleine Zeitung (https://www.kleinezeitung.at/service/newsticker/chronik/19723848/mann-von-baer-in-der-slovakei-verletzt), en Eslovaquia se calcula que hay unos 1.200 osos salvajes que normalmente evitan a las personas.
Sin embargo, pueden ocurrir encuentros peligrosos, especialmente cuando las madres osas protegen a sus cachorros. En los últimos años, algunos de esos enfrentamientos han resultado fatales. Informes recientes han demostrado que el número de encuentros entre humanos y osos aumentó de 650 en 2020 a aproximadamente 1.900 en 2024. El aumento de estos incidentes ha llevado al gobierno del primer ministro Robert Fico a tomar medidas drásticas. Fico enfatiza que la seguridad de los ciudadanos es la máxima prioridad, lo que justifica las medidas gubernamentales para cazar a los "osos problemáticos". No fue hasta abril de 2025 que se tomó la decisión de matar a 350 de estos osos, mientras que con el apoyo del ejército ya se han matado 23 osos. En este contexto, las organizaciones ecologistas critican esta medida por considerarla desproporcionada, ya que en Eslovaquia el oso pardo está protegido durante todo el año.
Agenda política e impacto social
La matanza de osos se convirtió en un tema central en el discurso político de Eslovaquia. En particular, el nuevo gobierno del primer ministro Fico utilizó la cuestión de los osos como elemento estratégico en su campaña electoral. Más de dos tercios de la población ven ahora a los osos como un gran peligro. Esto ha creado una profunda brecha entre los ambientalistas y el gobierno, que se burla de los esfuerzos educativos sobre el cuidado responsable de los osos, mientras que expertos ambientales como Michal Haring consideran que la población de osos es estable y no problemática.
Fico se burló de los medios críticos y de la oposición durante una reunión de gabinete y destacó sus acciones contra los osos como parte de su agenda política. Todo esto ocurre en el contexto de que la Comisión de la UE está examinando la declaración de emergencia del gobierno, que se emitió para facilitar los permisos de caza en dos tercios del país. El Ministro de Medio Ambiente, Tomáš Taraba, ya ha prometido eliminar los atractores que atraen a los osos y establecer normas de conducta en el trato con los osos para evitar más conflictos.
Críticas y posibles consecuencias.
Los ambientalistas están preocupados por los riesgos para la salud que representan para los osos los sitios de cebo ilegales, que no sólo aumentan el sufrimiento de los animales sino que también conducen a un aumento de los conflictos. Los estudios realizados en Rumania, donde la tasa de caza se duplicó a 500 animales después de los ataques mortales de osos, también muestran que las medidas drásticas no necesariamente mejoran el desarrollo de las poblaciones de animales salvajes. El oso pardo se considera una especie estrictamente protegida según la directiva de la UE y las medidas del gobierno eslovaco se siguen de cerca.
En general, la sociedad eslovaca y su gobierno se encuentran en un punto de inflexión crítico. La seguridad pública debe tenerse en cuenta tanto como la protección de la naturaleza y los animales. El acto de equilibrio entre estas demandas se está volviendo cada vez más difícil debido a los acontecimientos actuales y las decisiones políticas.