Los adolescentes arrasan la sala juvenil: ¡Gran decepción en St. Margarethen!
Tres jóvenes de 15 años destruyen por aburrimiento una habitación juvenil en St. Margarethen, Baja Austria, y causan grandes daños.
Los adolescentes arrasan la sala juvenil: ¡Gran decepción en St. Margarethen!
Tres chicos de 15 años causaron mucho revuelo en St. Margarethen an der Sierning cuando destrozaron una habitación juvenil en su ciudad. Los adolescentes derribaron las paredes de la habitación con un hacha y destruyeron un Wuzzler haciendo explotar un petardo en su interior. Los daños materiales resultantes ascienden a miles de euros, pero lo que es aún más decepcionante para la comunidad es el hecho de que este incidente ocurrió poco antes de que finalizaran las obras de renovación en el lugar, que fueron necesarias debido a las inundaciones. La alcaldesa Brigitte Thallauer expresó su descontento: "¿Qué pueden hacer tantos buenos visitantes para culpar a unos pocos de que no se porten bien?" y exigió que los jóvenes afectados también ayudaran en los trabajos de reparación, señalando al mismo tiempo las consecuencias jurídicas, ya que el asunto también podría dar lugar a antecedentes penales, como destacó el coronel de policía Leopold Schweiger. Según las autoridades policiales, este tipo de daños materiales también se castigan gravemente entre los jóvenes.
Estos incidentes plantean la cuestión de cómo orientar mejor a los jóvenes en la dirección correcta. Una forma eficaz de hacerlo es a través del trabajo de prevención, que se está convirtiendo cada vez más en el centro de las políticas públicas. Incluso antes de que la policía de Berlín implementara de manera integral el término “prevención”, los agentes buscaban activamente conversaciones con escuelas y jóvenes, porque reconocían que esto era de gran beneficio tanto para la policía como para la cooperación social. En Berlín, los representantes de la juventud son personas de contacto para las cuestiones que preocupan a los jóvenes. Conceptos como el de desvío, que permiten responder educativamente a las malas conductas juveniles, a menudo aceleran el proceso de investigación sin necesidad de iniciar procedimientos judiciales. Estos enfoques, que están firmemente establecidos en Berlín, también podrían servir como modelo en otras regiones para evitar incidentes similares en el futuro, como prevé la iniciativa de la Ley sobre tribunales juveniles.