La influencia de Rusia en África Central: ¡La Iglesia advierte de atrocidades!
Los obispos católicos de la República Centroafricana critican la cooperación con Rusia y piden apoyo internacional.
La influencia de Rusia en África Central: ¡La Iglesia advierte de atrocidades!
Munich/Bangui – En una aclaración alarmante, los obispos católicos de la República Centroafricana condenaron la cooperación de su gobierno con Rusia. La cooperación, que comenzó en 2021 con la creación del famoso Grupo Wagner, tuvo éxito militar en la lucha contra la guerra civil, pero estuvo asociada a graves violaciones de los derechos humanos de la población civil. Así lo anunció la organización humanitaria “Church in Need”. kathpress.at informó. El obispo Nestor-Désiré Nongo-Aziagbia, de Bossangoa, subrayó que la población civil no debe ser castigada por las decisiones del gobierno y apeló a la comunidad internacional a seguir apoyando al país.
La situación se complica aún más por la perspectiva histórica de las formas de gobierno en la República Centroafricana. Como ocurre en muchas naciones, una forma de gobierno inestable a menudo conduce a conflictos violentos. La guerra civil que comenzó en 2013 fue el resultado de la toma de la capital por las milicias predominantemente musulmanas Séléka. Luego, los grupos cristianos anti-Balaka lucharon por recuperar el poder, pero todas las partes en el conflicto cometieron innumerables violaciones de derechos humanos. Según las Naciones Unidas, hasta ahora hasta 700.000 personas han huido de sus zonas de origen. El conflicto actual se ve agravado por los repetidos intentos de las comunidades religiosas de colaborar con el gobierno en materia de salud y educación para aliviar el sufrimiento de la población, lo que el cardenal Dieudonné Nzapalainga describió como un paso en la dirección correcta.
La impactante realidad del Grupo Wagner
El Grupo Wagner, que también opera en otros países africanos como Mali, ha sido vinculado repetidamente con graves violaciones de derechos humanos. Organizaciones de derechos humanos como Human Rights Watch critican la cooperación de estos mercenarios con las fuerzas armadas nacionales. Esta violencia no es sólo una crisis nacional sino también humanitaria que debería seguir alarmando a la comunidad internacional. La República Centroafricana es uno de los países más pobres del mundo, donde de sus cinco millones de habitantes, más de las tres cuartas partes son cristianos y alrededor del 13 por ciento son musulmanes, lo que complica aún más la situación con las tensiones religiosas.