Futuro de la escuela Kinkplatz: ¿Se ha decidido un nuevo uso para el monumento?

Transparenz: Redaktionell erstellt und geprüft.
Veröffentlicht am

La antigua escuela secundaria de TI en Kinkplatz en Penzing está a punto de ser reutilizada. Después de años de estar vacío, se está desarrollando un concepto para el edificio protegido.

Die ehemalige Informatikmittelschule am Kinkplatz in Penzing steht vor einer neuen Nutzung. Nach jahrelangem Leerstand wird ein Konzept für das denkmalgeschützte Gebäude erarbeitet.
La antigua escuela secundaria de TI en Kinkplatz en Penzing está a punto de ser reutilizada. Después de años de estar vacío, se está desarrollando un concepto para el edificio protegido.

Futuro de la escuela Kinkplatz: ¿Se ha decidido un nuevo uso para el monumento?

La antigua escuela secundaria de TI en Kinkplatz en Penzing, un ejemplo único de arquitectura moderna, recuerda una larga espera de siete años mientras espera un nuevo uso. Construido entre 1992 y 1994 según los planos del renombrado arquitecto Helmut Richter, el edificio catalogado busca ahora un concepto sostenible que debería estar finalizado a principios de 2025.

La llamativa estructura de vidrio y acero, aunque estéticamente agradable, estuvo plagada de deficiencias técnicas desde el principio. Uno de los principales problemas era el calor extremo, que en verano era soportable bajo el techo de cristal. Además, se suponía que una instalación fotovoltaica proporcionaría sombra, pero nunca se implementó por razones económicas. Otro inconveniente era que el techo del gimnasio tenía goteras, lo que obligaba a recoger el agua en cubos, lo que suponía un importante inconveniente para los clubes deportivos que allí se encontraban. Estos problemas finalmente provocaron la formación de óxido y moho en el edificio.

El proceso conceptual y sus oportunidades.

En 2017 se creó un alojamiento alternativo temporal en Torricelligasse. Dos años más tarde, la ciudad decidió dejar de utilizar el edificio como escuela. La renovación integral prevista, que en 2019 costó más de 55 millones de euros, hizo que el uso de la escuela fuera económicamente imposible. La ciudad ha lanzado ahora un proceso conceptual para reasignar el área de aproximadamente una hectárea con un permiso de construcción de 99 años. La atención se centra no sólo en el aspecto financiero, sino también en la creación de valor añadido para el público.

Wiener Lageentwicklungs GmbH (WSE) gestiona la asignación de derechos de construcción en nombre de la ciudad. El plazo de presentación de ofertas cerró el 4 de septiembre y a principios de octubre se anunció que pronto estaría disponible el resultado. El portavoz de WSE, Wolfgang Trimmel, informó que aunque todavía no se ha seleccionado ningún concepto, ya hay dos proyectos en la lista de finalistas. "Ya no será una institución educativa, pero el edificio seguirá estando disponible para el público", dijo Trimmel.

Una perspectiva sobre posibles planes.

Se espera que el uso posterior previsto del edificio incluya actividades de ocio, así como instalaciones de salud y bienestar. Un jurado decidirá a principios del próximo año qué concepto ganará el contrato. Hasta entonces, cabe esperar que estas singulares salas pronto puedan asumir una nueva y animada función.

Información detallada y la evolución de la antigua escuela de Kinkplatz en un informe detallado en www.meinkreis.at para encontrar.