Un kayakista tragado por una ballena: ¡Así sobrevivió Adrián Simancas!
Un kayakista en Chile es tragado por una ballena jorobada, pero sobrevive ileso al aterrador momento.
Un kayakista tragado por una ballena: ¡Así sobrevivió Adrián Simancas!
Una experiencia impactante ocurrió frente a las costas de Punta Arenas en la Patagonia: el kayakista Adrián Simancas fue tragado por una ballena jorobada y poco después salió ileso. Su padre, Dell Simancas, filmó esta increíble aventura el pasado sábado mientras remaban juntos en un kayak amarillo en el Estrecho de Magallanes. La ballena apareció de repente, abrió su enorme boca y rodeó a Adrián y su kayak por unos segundos, lo cual quedó captado en un fragmento de video viral. En el momento en que Adrián desapareció en la boca de la ballena, su padre gritó: "¡Relájate, relájate, que ya voy!", mientras el joven de 24 años le gritaba: "Pensé que me había tragado", como antes. oe24.at informó.
En entrevista con TVN, Adrián dijo que no vio más que imágenes en azul y blanco que pasaban cerca de su rostro. Tenía un miedo terrible de que la ballena se lo hubiera “comido”. Su primer miedo apareció cuando resurgió, temiendo que su padre también pudiera estar en peligro. Pero el destino estaba de su lado; ambos quedaron físicamente ilesos. María José Pérez, bióloga marina de la Universidad de Chile, explicó que las ballenas jorobadas no pueden tragar a los humanos debido a sus bocas pequeñas. La ballena probablemente ni siquiera se dio cuenta del kayak, ya que vivía en un comedero con krill o peces, como popa.de informó. Estos incidentes son extremadamente raros.
Dell Simancas capturó en vivo la emoción de la situación y las imágenes muestran claramente lo rápido que la naturaleza puede intervenir en la vida humana. A pesar de la despreocupación y la alegría de un relajante viaje en kayak, este incidente les dejó una historia inusual que seguramente nunca olvidarán. Si bien estos encuentros entre humanos y animales plantean muchas preguntas, el recuerdo del momento en que Adrián salió de la boca de la ballena permanece inolvidable.