Revolución en las asambleas generales: ¡las reuniones virtuales están conquistando las Asambleas Generales!
Descubre cómo están cambiando las juntas generales virtuales a raíz de la VirtGesG. Consejos y novedades actuales para los accionistas.
Revolución en las asambleas generales: ¡las reuniones virtuales están conquistando las Asambleas Generales!
Los últimos acontecimientos en el ámbito de las juntas generales muestran que el marco jurídico y práctico ha cambiado significativamente en los últimos años. A partir de ahora las empresas pueden acceder a la tercera edición del renombrado trabajo estándar sobre la junta general de MANZ Verlag, que ofrece información completa sobre las nuevas opciones. Esta nueva edición tuvo especialmente en cuenta la base jurídica de las juntas generales virtuales, que fueron creadas por la ley sobre reuniones virtuales de empresas (VirtGesG). Alto OTS Redactado de acuerdo con los requisitos actualizados, el trabajo ofrece a los usuarios del derecho soluciones valiosas y orientadas a la práctica para organizar y llevar a cabo juntas generales, que hoy en día se celebran cada vez más en formatos virtuales.
Las reuniones virtuales van en aumento
La opción de celebrar juntas generales de accionistas virtuales, introducida hace unos meses, supone una revolución, especialmente para las empresas cotizadas. MPLaw explica que desde entonces los accionistas pueden ejercer su derecho de voto a través de medios de comunicación electrónicos, lo que permite una participación más fácil en la votación. Sin embargo, esta innovación requiere que las empresas proporcionen soluciones técnicas adecuadas para registrar los votos electrónicamente y garantizar que todos los participantes reciban el mismo trato.
Los particulares e instituciones que quieran participar en juntas generales virtuales deben adaptarse a diferentes formatos. Se recomienda utilizar herramientas especiales para votar, como software de votación dedicado o formularios de correo electrónico. En particular, el uso del correo electrónico para votar se demostró en la primera junta general puramente virtual de una empresa que cotiza en bolsa y requirió la creación de un formulario de votación claramente estructurado. Por tanto, las empresas se enfrentan a la tarea de adaptar y desarrollar continuamente sus sistemas y procesos a los nuevos requisitos legales.