Siria tras la caída de Assad: ¿quién tendrá el nuevo poder?
Después de la caída de Assad, Siria enfrenta desafíos: HTS en el poder, voces críticas sobre la integración de otros grupos.

Siria tras la caída de Assad: ¿quién tendrá el nuevo poder?
¡En Siria el panorama político está patas arriba! Tras el sorprendente derrocamiento del presidente Bashar al-Assad por el grupo rebelde Hayat Tahrir al-Sham (HTS), los nuevos dirigentes de Damasco han declarado como su objetivo la rápida reconstrucción del Estado. Sin embargo, el HTS, dirigido por Ahmed al-Sharaa, también conocido como Abu Mohammed al-Golani, ya ha recibido críticas por instalar sólo a confidentes en puestos clave. Esto genera preocupación sobre la estabilidad futura del país, especialmente dada la diversidad de la sociedad siria y la necesidad de incluir a todos los grupos étnicos en las nuevas estructuras estatales. oe24.at informó.
Riesgos y desafíos para los nuevos gobernantes
Muchos estados consideran que el HTS es una organización terrorista, y su rápida toma del control en grandes ciudades como Alepo y Damasco se ve presionada para preservar la infraestructura estatal existente. Mohammed Ghazal, el nuevo gobernador de Damasco, insiste en que no hay problemas entre etnias y religiones en el país, mientras que a los diplomáticos extranjeros les preocupa que otras facciones poderosas, en particular el grupo alauita, no estén siendo suficientemente incluidas en la reconstrucción. Esto podría poner en peligro la unidad del país. fr.de determina.
Además de la incertidumbre política, también hay dudas sobre el papel de las mujeres bajo el nuevo gobierno. Aunque el HTS ha mostrado cierta apertura en su centro de poder, Idlib, al permitir que las iglesias practiquen su religión y abolir los códigos de vestimenta para las mujeres, la segregación de género en las instituciones educativas persiste. Los nuevos gobernantes deben, por un lado, garantizar la estabilidad social y, por otro, gestionar las relaciones diplomáticas con los países vecinos, especialmente con Turquía, que quiere ampliar su zona de influencia en el norte de Siria. Estos acontecimientos podrían ser cruciales para el futuro de Siria y sumergir al país en nuevos conflictos.