Juntos por una vida sin violencia: ¡Orange the World en Stockerau!
Stockerau apoya la campaña de la ONU “Pintar el mundo de naranja” contra la violencia contra las mujeres. La solidaridad y la prevención son el foco.

Juntos por una vida sin violencia: ¡Orange the World en Stockerau!
En un impresionante símbolo contra la violencia contra las mujeres, el ayuntamiento de Stockerau brilla en naranja brillante. Con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer el 25 de noviembre, iniciado por las Soroptimistas y en colaboración con el municipio, se izaron banderas y se realizó una caminata conjunta por la ciudad. Con esta acción se pretende enviar una fuerte señal sobre el derecho a una vida no violenta, como subrayó el alcalde Andrea Völkl. Este compromiso es necesario porque la violencia contra las mujeres sigue siendo una realidad alarmante que tiene lugar en muchos ámbitos de la vida, ya sea en el hogar, en la escuela o en el espacio digital, y en muchos casos no es visible, informa meinbezirk.at.
Al mismo tiempo, el 25 de noviembre marcó el inicio de la campaña internacional de la ONU “Pintar el mundo de naranja”, que durará hasta el 10 de diciembre. La campaña llama la atención sobre el problema actual de la violencia de género, que es una de las violaciones de derechos humanos más comunes. El Ministerio Federal de Justicia participa en esta iniciativa iluminando los edificios en naranja e introduciendo diversas medidas para prevenir la violencia y proteger a las mujeres y las niñas de la violencia, como informa bmj.gv.at. También se destaca la importancia de las clínicas contra la violencia, que ofrecen exámenes médicos gratuitos e independientes a las víctimas de la violencia.
Medidas de prevención de la violencia
Las clínicas contra la violencia recientemente fundadas en Austria son un paso importante para apoyar a los afectados. Esta clínica ambulatoria ofrece exámenes especiales que garantizan la preservación objetiva de las pruebas y pueden ser decisivos en futuros procesos penales. Además, se promueve la cooperación con organizaciones de protección de las víctimas para que éstas puedan abandonar relaciones violentas.
En Graz ya se han abierto las primeras clínicas contra la violencia y en Viena se está preparando otra. Estas iniciativas forman parte de un enfoque integral que no sólo apunta al bienestar individual, sino que también afecta a la sociedad en su conjunto. El compromiso y las iniciativas de diversas instituciones subrayan lo importante que es abordar este apremiante problema social y, en última instancia, crear un entorno más seguro para las mujeres y las niñas.