Después del festín: ¡Cómo vencer el infame coma alimentario!
Descubra por qué a menudo nos sentimos cansados después de comer y cómo puede utilizar trucos sencillos para combatirlo, especialmente en vacaciones.

Después del festín: ¡Cómo vencer el infame coma alimentario!
Después de un suntuoso banquete, muchas personas están familiarizadas con la sensación de cansancio repentino, que a menudo provoca una disminución de la actividad. Conocido como “coma alimentario”, este fenómeno es desencadenado por varios procesos fisiológicos que ocurren en el cuerpo después de comer. Como informa "Heute.at", la digestión requiere mucha energía, que dirige la sangre al estómago y a la región intestinal. Esto reduce el flujo sanguíneo al cerebro, lo que puede provocar somnolencia. Además, el alto contenido de carbohidratos y grasas en las comidas juega un papel crucial: un rápido aumento del azúcar en sangre, seguido de una caída abrupta, hace que muchas personas se sientan débiles después de comer.
El papel de las hormonas y la nutrición.
El neurólogo Christopher Winter explica que el aminoácido triptófano también contribuye a este cansancio, ya que se convierte en el cerebro en serotonina y posteriormente en melatonina, creando un efecto relajante. Estos cambios hormonales aumentan la sensación de fatiga, especialmente después de comidas copiosas. El tipo de comida también influye: los alimentos ricos en carbohidratos, como el pan blanco o los dulces, aumentan rápidamente los niveles de azúcar en la sangre, mientras que los alimentos ricos en proteínas, como la carne y los frutos secos, mantienen la saciedad durante más tiempo, pero también pueden provocar sensación de pesadez, como descubrió "ferwer.de".
Hay algunas medidas sencillas que puede tomar para combatir la fatiga. El ejercicio, como una caminata corta después de comer, puede ayudar a la digestión y aumentar los niveles de energía. Los expertos también recomiendan comer porciones más pequeñas para minimizar la tensión en el sistema digestivo y evitar fluctuaciones repentinas de azúcar en sangre. Especialmente durante la temporada festiva, cuando hay muchas comidas gourmet en el menú, seguir hábitos alimenticios más ligeros y apoyar la flora intestinal con probióticos puede ayudar a aumentar la vitalidad general y evitar la fatiga excesiva.