Mette-Marit rompe el silencio: ¡Tiempos difíciles para la realeza de Noruega!
Mette-Marit habla del escándalo que rodea a su hijo Marius Borg Høiby y que afecta a la familia real noruega. Un año desafiante.

Mette-Marit rompe el silencio: ¡Tiempos difíciles para la realeza de Noruega!
La corte real noruega está en el centro de un inquietante escándalo que ha sumido a la familia real en una profunda crisis. Mette-Marit, la princesa heredera de Noruega, habló por primera vez en una entrevista sobre la difícil situación de su hijo mayor, Marius Borg Høiby. El joven de 27 años enfrenta graves acusaciones que van desde agresión hasta presuntos delitos sexuales. Estas acusaciones han creado tensiones no sólo personales sino también públicas para toda la familia real. Mette-Marit calificó los últimos meses de "exigentes" y admitió: "Fue duro. No hay otra manera de llamarlo", afirmó. schwaebische-post.de.
La situación se intensificó cuando Marius fue detenido en agosto por una golpiza en la que se volvió violento con su entonces novia bajo la influencia del alcohol y las drogas. Aunque niega las acusaciones de haber cometido un delito y no se han presentado cargos contra él, los acontecimientos en curso que lo rodean han llevado a la familia real a los titulares. Mette-Marit subrayó que Marius llevaba mucho tiempo buscando ayuda profesional, lo que era fundamental para que la familia superara juntos los desafíos. "No creo que sin esta ayuda podamos superar esta situación juntos como familia y al mismo tiempo cumplir con nuestras obligaciones para con el pueblo noruego", explicó. 20min.ch informó.
Asuntos familiares bajo vigilancia
El rey Harald V también expresó su preocupación por la situación y dijo que los problemas de drogas, la violencia y las enfermedades mentales se están convirtiendo en desafíos cada vez mayores en Noruega y en todo el mundo. Subrayó que es difícil cuando alguien a quien amas se mete en tales problemas: "Pero ahora tenemos que dejar que el sistema judicial haga su trabajo como se supone que debe hacerlo. No podemos interferir en el caso", añadió el monarca. Estas declaraciones demuestran que la presión no sólo viene del exterior, sino que también se siente con fuerza dentro de la familia real. El escándalo ya ha causado una considerable indignación y las preocupaciones sobre Marius también parecen estar poniendo a toda la familia real en una posición estresante.