100 años de Maria Loley: A Life for Refugee Aid en Poysdorf
100 años de Maria Loley: A Life for Refugee Aid en Poysdorf
El 22 de noviembre de 2024 es un día muy especial, porque hace exactamente 100 años la notable María Loley nació en Poysdorf en Weinviertel. No solo era una ayudante de refugiado, sino que también se convirtió en una figura inspiradora en la historia de la ayuda humanitaria en Austria.
Después de la Segunda Guerra Mundial,Maria Loley experimentó la emergencia de numerosos refugiados, especialmente los sobrevivientes de la SO "Brünner Death March". Formaron profundamente estas experiencias y despertaron el incansable deseo de ayudar a las personas necesitadas. Así que fundó el "Movimiento con Human", que aún está activo y está comprometida con los derechos y el bien de los refugiados.
Un esfuerzo incansable para la humanidad
Su compromiso le trajo reconocimiento y resistencia. Numerosos premios adornan su currículo vitae, entre otras cosas por su apoyo listo durante una fase particularmente crítica cuando varios cientos de cristianos llegaron a Viena desde Irán. Junto con el entonces Ministro del Interior, pudo negociar un permiso de residencia para este grupo.
A pesar de la adversidad que experimentó, incluida una terrible carta de Bombatte, en la que perdió un dedo, permaneció leal a su misión. Su creencia era la fuente de su energía y motivación. "Jesús es mi fuerza, me sostiene, me fortalece", dijo una vez, y esta oración refleja su convicción profundamente arraigada de que la humanidad es algo sagrado.
Maria Loley es más que una figura histórica; Es un modelo a seguir para todos los que trabajan para los débiles y necesitados. El trabajo de su vida muestra cuán importantes son la solidaridad y la compasión en nuestra sociedad. En un momento en que la humanidad a menudo se empuja en el fondo, debemos orientarnos a sus incansables esfuerzos e inspirarnos para actuar a sí mismo.
El recuerdo de Maria Loley permanece vivo y su mensaje es relevante. En este día especial, pensamos en su coraje y sus fuerzas inagotables, que ella ha obtenido de su fe en sus últimos años. Ella nos enseña cuán valiosa es la ayuda humana y que cada uno tiene el potencial de marcar la diferencia.
"La humanidad era su vida", resume el cardenal Christoph Schönborn y, por lo tanto, nos recuerda que la ayuda y la caridad siguen siendo esenciales en estos días. El legado de Maria Loley continuará viviendo y será una fuente de inspiración para las generaciones futuras.
Kommentare (0)