El jefe de la FIA ataca a los pilotos de Fórmula 1: ¡Bonitas palabras, poca acción!
El presidente de la FIA, Bin Sulayem, es criticado por los pilotos de Fórmula 1 por las multas y los estándares de carrera. Las tensiones están aumentando.

El jefe de la FIA ataca a los pilotos de Fórmula 1: ¡Bonitas palabras, poca acción!
El conflicto latente entre Mohammed Ben Sulayem, presidente de la FIA, y los pilotos de Fórmula 1 está alcanzando nuevas dimensiones. La disputa se ha intensificado desde que Ben Sulayem prohibió a los conductores usar la radio de boxes y varios pilotos, incluidos Max Verstappen y Charles Leclerc, fueron castigados recientemente por comportamiento inadecuado. En particular, la Asociación de Pilotos de Grandes Premios (GPDA) pide con fuerza comisarios profesionales y permanentes, equivalentes a los comisarios de carrera, para garantizar una mayor equidad en las decisiones de la dirección de carrera, como por ejemplo motosports.net informó.
Sin embargo, Ben Sulayem se opuso tajantemente a las sugerencias de los conductores. Las solicitudes de nombramiento de delegados profesionales se descartan como “bellas palabras sin acción”. El presidente de la FIA destaca que se necesitaría mucho dinero para alcanzar este estándar y critica que los pilotos no estén dispuestos a contribuir a los costes. "Si quieren ser profesionales, entonces no quieren pagar por ello. Eso es obvio", dijo clara e inequívocamente en una entrevista con hoy.en.
Conflicto y responsabilidad
Además, Ben Sulayem exige que los conductores sean transparentes acerca de sus propias ganancias de más de 100 millones de dólares en lugar de centrarse únicamente en la FIA. "Tienen derecho a gastar su dinero como quieran", añadió, cuestionando por qué los pilotos no incluyeron en la discusión a otras organizaciones, como Formula One Management, que velan por los intereses comerciales del deporte. Sin embargo, estas tensiones no sólo ponen de relieve diferencias financieras, sino que también ponen de relieve un problema mayor de confianza y comunicación dentro de la comunidad deportiva.
La situación se está volviendo cada vez más delicada teniendo en cuenta los récords de audiencia y popularidad de la Fórmula 1. Los llamados a una mayor transparencia y coherencia en la gestión de las carreras se han vuelto más fuertes a medida que los fanáticos exigen decisiones justas, particularmente después de los controvertidos resultados de la temporada actual. Ben Sulayem se enfrenta al reto de conciliar las realidades financieras con las demandas legítimas de los pilotos para evitar posibles grietas en la relación entre la FIA y los pilotos.