El nuevo plan de Baja Austria: ¡La guardería como frente contra el Islam!
Descubra todo sobre la población musulmana en Baja Austria, las medidas políticas y la evolución histórica hasta 2025.
El nuevo plan de Baja Austria: ¡La guardería como frente contra el Islam!
Actualmente, los debates sobre la inmigración y el Islam en Austria están calentando los ánimos, especialmente en el estado federado de Baja Austria. Allí, el gobierno estatal negro y azul, encabezado por Udo Landbauer, decidió un nuevo plan de acción para combatir el Islam radical. Con un claro objetivo de evitar las llamadas amenazas a la seguridad interna, se aboga por la educación de los jóvenes en guarderías católicas en lugar de en mezquitas y escuelas chiítas. Cómo dolomitenstadt.at Según informes, un elemento central de este plan es la prohibición del uso del velo para las funcionarias públicas.
Bajo número de musulmanes y contextos históricos
Los críticos se quejan de que la proporción de musulmanes en Baja Austria es muy baja: menos del 5%. Sin embargo, el gobierno federado señala contextos históricos que afectan a los musulmanes en Austria, especialmente en Burgenland. En el siglo X, los musulmanes comenzaron a establecerse en Burgenland, donde hoy la proporción es más baja. Los primeros grupos musulmanes notables en Austria surgieron en el siglo XV con las incursiones otomanas. Como resultado, la población musulmana en Austria siguió desarrollándose, especialmente después de las dos guerras mundiales, cuando llegaron al país inmigrantes y refugiados. así que haz ruido Wikipedia Actualmente hay hasta 700.000 musulmanes viviendo en Austria, lo que representa más del 8% de la población total.
Las medidas actuales del gobierno de la Baja Austria tienen como objetivo regular el Islam y su cultura en Austria y controlar el asentamiento de musulmanes. Además de este plan, que pretende dificultar la integración social de los musulmanes, existen tensiones históricas entre las religiones. Para muchos, la política de integración de Austria se interpreta como una señal de un rechazo más profundo del Islam en su conjunto, una cuestión que se mezcla con los desafíos de la futura identidad cultural del país.