Un estudio revela: ¡los microplásticos en las botellas de vidrio son más peligrosos que en el plástico!
Un estudio actual muestra que los microplásticos en las botellas de vidrio son de 5 a 50 veces más que en las botellas de plástico. Explicación de los riesgos para la salud y recomendaciones de actuación.

Un estudio revela: ¡los microplásticos en las botellas de vidrio son más peligrosos que en el plástico!
Un estudio reciente financiado por la Autoridad Alimentaria y la región de Alta Francia descubrió que los microplásticos están presentes en niveles alarmantes en las bebidas embotelladas de vidrio. El estudio se llevó a cabo en el laboratorio de Boulogne-sur-Mer, en el norte de Francia. Los resultados muestran que las bebidas en botellas de vidrio contienen en promedio alrededor de 100 partículas de microplásticos, lo que supera entre cinco y cincuenta veces el contenido en botellas de plástico o latas de metal. Se comprobó que las partículas de microplástico provienen principalmente de la pintura de los cierres metálicos, las tapas de corona, y que estas suelen presentar finos rayones provocados por un almacenamiento inadecuado.
El estudio recomienda urgentemente una mejor limpieza de los tapones de las botellas para reducir las partículas de microplástico hasta en un 60 por ciento. La autoridad alimentaria también pide cambios en las condiciones de almacenamiento y en la pintura de los cierres para aumentar la seguridad de las bebidas. Estos hallazgos podrían tener consecuencias de gran alcance para la industria del embalaje y el comercio minorista al resaltar la necesidad de minimizar los microplásticos en alimentos y bebidas. Periódico pequeño informa que el estudio está integrado en un contexto más amplio de la investigación actual sobre los efectos de los microplásticos en la salud.
Antecedentes sobre los microplásticos
Los microplásticos son un tema central en la investigación sobre medio ambiente y salud. Aunque las partículas de microplásticos se encuentran en todas partes en la naturaleza, sus efectos sobre la salud humana están en gran medida inexplorados. Alto Compuestos termoplásticos Las partículas de microplásticos pueden ingresar al cuerpo humano a través de los alimentos y el agua. Los estudios demuestran que pueden provocar efectos inflamatorios y alteraciones hormonales, e incluso pueden suponer un mayor riesgo de cáncer.
Los riesgos para la salud de los microplásticos afectan especialmente a grupos vulnerables, como los niños y las mujeres embarazadas. También hay evidencia de que los microplásticos tienen efectos negativos sobre el sistema inmunológico y pueden aumentar el riesgo de enfermedades crónicas. Los microplásticos ingresan al organismo humano a través de la ingestión de alimentos y agua contaminados y de la inhalación de partículas de polvo y se han detectado en los pulmones, el tracto gastrointestinal e incluso en la sangre.
Investigación y educación
Para comprender mejor los riesgos de los microplásticos, el Instituto Federal de Evaluación de Riesgos (BfR) lleva a cabo proyectos de investigación desde 2013. La investigación comenzó analizando los microplásticos en mejillones y ostras y ahora se ha ampliado a la salud humana. Varios estudios publicados en revistas científicas también examinaron la posible absorción de microplásticos en las células humanas. Los resultados del grupo junior de nanotoxicología se incorporan a numerosas disertaciones y la investigación continúa de forma continua.
El BfR ha reconocido que es fundamental educar y concienciar a la población sobre los riesgos de los microplásticos. Las encuestas actuales muestran un creciente interés y preocupación entre la población por los microplásticos en los alimentos. Como parte de los proyectos de cooperación, se recopiló información sobre evaluaciones de riesgos y necesidades de información de los ciudadanos para seguir promoviendo la educación sobre estos riesgos para la salud.
En general, la investigación deja claro que se necesita una acción colectiva para minimizar la exposición a los microplásticos. El uso de productos sin envasar y embalajes sostenibles podría ayudar a reducir la cantidad de microplásticos en nuestro medio ambiente y, por tanto, también en nuestro organismo. Sin embargo, la cuestión sigue siendo compleja y requiere más estudios para obtener una imagen completa del impacto en la salud humana.