Solingen recuerda: guía de la ciudad habla sobre los bombardeos de 1944

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Recuerdos de los bombardeos en el sur de Solingen en 1944: el guía de la ciudad, Horst Rosenstock, informa sobre el destino y la destrucción.

Solingen recuerda: guía de la ciudad habla sobre los bombardeos de 1944

Solingen. Los días 4 y 5 de noviembre de 1944, la ciudad sufrió uno de los ataques aéreos más devastadores de la Segunda Guerra Mundial. Horst Rosenstock, que entonces tenía sólo seis años, recuerda vívidamente los terribles momentos en los que él y su familia lucharon por su vida. “Nos agachamos en el suelo y vimos caer las bombas”, así describe el guía actual de la ciudad su dramática huida con su madre y su abuelo al cercano estadio Dorper Hof.

Durante una visita guiada realizada el sábado por Rosenstock con motivo del aniversario del atentado, una decena de personas interesadas se reunieron en la antigua estación principal de trenes de Solingen. Aquí empezó el desastre: 170 bombarderos Lancaster que despegaron de Coblenza arrojaron toneladas de bombas explosivas e incendiarias sobre la ciudad en sólo 18 minutos. Solingen era entonces considerado el corazón de la industria siderúrgica alemana. El ataque se cobró alrededor de 1.800 vidas e hirió a más de 2.000 personas más. Trágico: 5.312 casas y unos 15.000 apartamentos fueron destruidos mientras la ciudad ardía en llamas.

Los hermanos empresarios Franz y Robert Kieserling murieron bajo una lluvia de bombas

El grupo siguió a Rosenstock hasta los restos de la antigua fábrica de máquinas Kieserling & Albrecht, donde murieron 80 personas, entre ellas los hermanos Franz y Robert Kieserling. Mientras que el ayuntamiento de la ciudad de Dorp no sufrió daños, otras empresas, como la mayor fragua de Solingen, la empresa Schlemper y la fábrica de armas de Eickhorn, que quedaron completamente destruidas, sufrieron daños. "Fue un milagro que la Iglesia de Lutero no sufriera daños", añadió Rosenstock. Cautivó a sus oyentes con impresionantes imágenes y anécdotas de la historia de Solingen, mientras ilustraba vívidamente los horrores de la guerra y la destrucción de la ciudad.