El cambio climático trae consigo una avalancha de polen: ¡así luchan las personas alérgicas por sobrevivir!
Alergias y contaminación por polen 2025: los expertos explican las causas, los enfoques terapéuticos y la evolución actual para los afectados.
El cambio climático trae consigo una avalancha de polen: ¡así luchan las personas alérgicas por sobrevivir!
¡El número de personas alérgicas al polen en Austria y Alemania alcanza niveles alarmantes! Según información de Periódico pequeño Alrededor del 50 por ciento de la población padece actualmente sensibilidad a diversas sustancias y muchos de ellos padecen alergias provocadas por el polen. El polen de los abedules y la hierba provoca síntomas especialmente graves y puede provocar reacciones alérgicas como ojos llorosos, estornudos y dificultad para respirar. Con el aumento de las temperaturas y los inviernos más suaves, la temporada de polen también se ha alargado, de modo que la contaminación puede comenzar ya en enero o febrero, como subraya también la Asociación Alemana de Alergia y Asma.
Recuentos de polen y sus consecuencias.
El jefe de aerobiología del Servicio de Información sobre Polen de Austria, Lukas Dirr, explica que este año la temporada de polen comenzó temprano. El polen de avellano y aliso alcanzó su punto máximo a principios de marzo, mientras que el polen de fresno se puede esperar entre mediados de marzo y abril. Se espera que el principal culpable, el polen de abedul, cause menos contaminación este año de lo habitual porque florece en un ciclo de dos años. A pesar de este aumento moderado de los niveles de polen de abedul, el calentamiento anterior cubrió a los alérgicos con abundante polen durante hasta 300 días al año, advirtió BR.
La situación se ve agravada por el cambio climático: las altas temperaturas y la contaminación del aire no sólo hacen que el polen vuele antes y con mayor intensidad, sino que también lo hacen más agresivo. Estos cambios tienen un impacto especialmente grave en los asmáticos y en los niños, que sufren cada vez más estos síntomas. La carga de polen no sólo es cada vez más numerosa, sino también más agresiva, circunstancia que, según los científicos de medicina medioambiental, puede provocar a largo plazo reacciones alérgicas más fuertes.
Por tanto, los afectados deberían actuar de forma proactiva. Tomar medicamentos para aliviar los síntomas y someterse a inmunoterapia puede reducir el sufrimiento. Además de los medicamentos tradicionales, los expertos recomiendan utilizar los servicios de información sobre polen para conocer los niveles actuales de polen y planificar mejor sus propias actividades.