¿Hermano o hijo único? ¡Un nuevo estudio revela diferencias sorprendentes!
Un nuevo estudio muestra cómo el número y el orden de los hermanos influyen en el desarrollo de la personalidad de los niños.

¿Hermano o hijo único? ¡Un nuevo estudio revela diferencias sorprendentes!
El debate sobre los efectos del orden de nacimiento en la personalidad es un tema candente que ha inspirado numerosos estudios. Un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad de Calgary muestra que los niños sándwich, aquellos con hermanos mayores y menores, tienen una ventaja en comparación con los niños únicos en lo que respecta a rasgos como la honestidad, la modestia y la amabilidad. Según el extenso estudio, que recopiló datos de más de 700.000 participantes, parece que los niños de familias numerosas tienden a desarrollar personalidades más cooperativas. La probabilidad de que un niño más amigable provenga de una familia de seis personas es del 60%. Sin embargo, el estudio subraya que estas diferencias son sólo menores: muchos niños también pueden ser cooperativos, como hoy.en informó.
En Alemania, más de la mitad de las familias viven con un solo hijo, aunque esto suele deberse a diversos motivos, desde la sobrecarga de los padres hasta consideraciones económicas. A pesar de la creencia popular de que los hijos únicos son socialmente reservados o egoístas, numerosos estudios muestran que estas suposiciones no son necesariamente exactas. En particular, se señala que los hijos únicos suelen tener vínculos más estrechos con sus padres y suelen tener mejores resultados en la escuela. El profesor Toni Falbo explica que los hijos únicos suelen participar más en las decisiones, lo que tiene un efecto positivo en el desarrollo. Estos resultados sugieren que los hijos únicos no necesariamente tienen menos habilidades sociales, sino que, por el contrario, pueden ser más activos en muchos contextos sociales. Spektrum.de informó.
Mito y realidad de los hijos únicos
Los estereotipos persistentes sobre los hijos únicos como personas egoístas o socialmente incompetentes son refutados por la evidencia científica. Los metanálisis de la década de 1980 muestran que los hijos únicos no se diferencian significativamente de otros niños en sus rasgos de personalidad. De hecho, los hijos únicos a menudo parecen ser iguales o incluso superiores en habilidades sociales porque tienen que buscar amistades activamente. Los estudios indican que las habilidades sociales generalmente ya no desempeñan un papel en la edad escolar; el contacto con los compañeros en los grupos de niños pequeños y en las escuelas primarias compensa las diferencias. En general, estos hallazgos sugieren que crecer como hijo único puede ofrecer una serie de beneficios que van mucho más allá de los mitos tradicionales.