Primer plan regional para Uckermark-Barnim: ¡centrarse en la energía eólica y el medio ambiente!
El plan regional Uckermark-Barnim entra en vigor y determina el uso del viento, así como la movilidad y la protección del medio ambiente en la región.
Primer plan regional para Uckermark-Barnim: ¡centrarse en la energía eólica y el medio ambiente!
¡La región de Uckermark-Barnim abre un nuevo capítulo en el uso de la energía eólica! El revolucionario plan regional integrado entró en vigor el 23 de octubre, tras una resolución de la asamblea regional del 21 de mayo de 2024. Gracias a este reglamento, la región no sólo actúa como pionera en Brandeburgo, sino también a nivel nacional, al implementar de inmediato los nuevos requisitos para el uso de la energía eólica. Claudia Henze, responsable de la planificación, se alegra: “¡Somos los primeros en Alemania en poder presentar un plan válido!”
¡Áreas prioritarias de viento y objetivos alcanzados!
Con determinaciones específicas, el plan regional asume la responsabilidad de al menos el 1,8 por ciento de la superficie designada hasta finales de 2027 e incluso el 2,2 por ciento hasta finales de 2032. En las zonas especialmente designadas como prioritarias para la energía eólica, que cubren un total de 10.098 hectáreas, las turbinas eólicas están protegidas por la ley de construcción. Estas nuevas regulaciones permiten rechazar solicitudes fuera de estas zonas de manera más efectiva: ¡una verdadera victoria para la protección del medio ambiente y la población local!
Diversidad para Uckermark
¡Pero eso no es todo! El plan también incluye medidas para la extracción de materias primas y presenta ubicaciones para la futura producción de hidrógeno en la región. Ni siquiera se descuidan los recursos turísticos; Se dan prioridad a las zonas con actividades acuáticas y zonas naturales. Por lo tanto, también se hace hincapié en la protección de los espacios naturales abiertos, que son cruciales para el medio ambiente y la sociedad. Se ha fijado el rumbo hacia el desarrollo sostenible, que fortalece a Uckermark no sólo como un lugar energético, sino también como un hogar en el que vale la pena vivir.