Con corazón y voz: Lioba Lichtschlag lleva la esperanza a la cárcel
En Düsseldorf, Lioba Lichtschlag lleva 40 años en prisión, dirigiendo el coro y promoviendo la humanidad entre los presos.

Con corazón y voz: Lioba Lichtschlag lleva la esperanza a la cárcel
¡El centro penitenciario de Düsseldorf (JVA) vive verdaderas cumbres musicales! El compromiso de décadas de Lioba Lichtschlag, director de coro de 81 años, arroja luz sobre la vida en prisión, a menudo aburrida. Ha dirigido el coro de la prisión durante más de 40 años y se asegura de que los niños no sólo abran la voz sino también el corazón cuando cantan. En el servicio religioso del domingo, la atención se centra en la dirección musical de los presos. Lichtschlag, a quien llama afectuosamente “madre”, tiene un gran talento: además del piano, también sabe tocar la viola y reúne canciones en diferentes idiomas para adaptarse a cada miembro del coro. Cómo ksta.de informa que los ensayos reflejan un sentimiento de respeto y comunidad, que para los presos se siente como un trato justo en prisión.
Compromiso comprometido con la humanidad
¡Lo tácito se vuelve audible en las canciones del coro! La Asociación Carcelaria Católica de Düsseldorf, de la que Lichtschlag es miembro, aboga por una mayor humanidad detrás de los muros de las prisiones. Más de 50 voluntarios apoyan a los reclusos a través de proyectos musicales, así como a escribir y encontrar alojamiento después de la liberación, y el próximo curso introductorio comenzará el 20 de enero de 2025. erzbistum-koeln.de sabe informar. Con un rápido vistazo a través de sus gafas, Lichtschlag muestra su presencia y silencia a los prisioneros, quienes luego se concentran en las notas de sus cancioneros. A través de los ensayos semanales, los prisioneros experimentan no sólo una conexión artística sino también emocional. Antonio, miembro activo, destaca que su trabajo a favor de los presos es invaluable.
¿La receta secreta de sus muchos años de trabajo? Un sentido de comunidad y aceptación, que también incluye destinos difíciles del pasado. “Cuando cantan no fingen”, afirma Lichtschlag, que a través de la música pudo conocer la verdadera personalidad de los prisioneros. Sus ensayos corales en prisión son más que solo cantar: son un punto brillante en una vida a menudo oscura.