Experimente el ayuno de una manera nueva: ¡así encontramos la libertad interior y la alegría de vivir!
En entrevista con Sor Huberta Rohrmoser, la Hermana de María explica el significado más profundo del ayuno como camino hacia la libertad interior y la alegría de vivir durante la Cuaresma.
Experimente el ayuno de una manera nueva: ¡así encontramos la libertad interior y la alegría de vivir!
Viena, 4 de marzo de 2025 (KAP) – La Cuaresma, que comienza el 5 de marzo con el Miércoles de Ceniza, es vista por Sor Huberta Rohrmoser, experimentada líder de meditación y Hermana de María, como una invitación a la libertad interior y al fortalecimiento de las relaciones interpersonales. En una conversación con kathpress Ella explica que ayunar no se trata sólo de prescindir. “Una resolución de ayuno que carga la vida de otras personas no tiene sentido”, afirmó la monja. Su enfoque está en reconocer y dejar de lado las dependencias para promover la alegría de vivir. Su filosofía enfatiza la importancia de ser consciente de uno mismo, de los demás y de Dios, en lugar de la autooptimización o la abstención debido a la presión.
Como parte de su práctica espiritual, la Hna. Rohrmoser llama a un uso consciente de los medios de comunicación para no dejarse abrumar por las noticias negativas. El objetivo es reconocer tanto los aspectos oscuros como los positivos del mundo. “Nosotros, como seres humanos, debemos ser conscientes de nuestros sentimientos y darles espacio, pero en última instancia también tenemos que dejarlos ir para vivir el presente”, explica. La comprensión del ayuno como una práctica holística también incluye movimientos regionales, alimentación consciente y momentos regulares de gratitud, elementos que ayudan a que la vida sea activa y digna de ser vivida. Según Sor Huberta, el ayuno se trata de crear espacio para la vida y dejar de lado las necesidades inmediatas para lograr la libertad psicológica y espiritual. Como ella describe, esta actitud contribuye a reconocer y cumplir los anhelos profundos de la vida, no como una limitación sino como una liberación.
Las Hermanas de María, a las que pertenece la Hna. Rohrmoser, ven su vocación como un acto de servicio a las personas. “Puedo hacer felices a las personas a través de mi escucha atenta y con pequeños impulsos para sus vidas”, dice, refiriéndose a su enfoque de la guía espiritual. Está convencida de que Dios acompaña personalmente a cada persona y ve su trabajo como un apoyo en el desarrollo de cada camino de vida. Ella ve el mes de ayuno como una fase importante para la autorreflexión y el cultivo de relaciones, tanto con Dios como con otras personas.