Trump dispara una nueva aduana contra China, ¿comienza la guerra comercial?
Trump dispara una nueva aduana contra China, ¿comienza la guerra comercial?
El presidente Donald Trump ha redimido su promesa de la campaña electoral y aumentó los aranceles a las importaciones chinas. El sábado, anunció una tarifa aduanera del 10% a todos los productos chinos que se importan a los EE. UU., Dentro del marco de medidas comerciales extensas que también afectan a México y Canadá. Ahora la pregunta surge cuán fuertemente repelerá el liderazgo chino.
La reacción de China a las nuevas tarifas
Después del anuncio del aumento de la aduana, los funcionarios chinos que fueron atropellados durante una semana de vacaciones públicas juraron presentar una queja a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y tomar las contramedidas apropiadas sin indicar exactamente en qué forma. El Ministerio de Comercio de China declaró el domingo que la introducción de una aduana del 10% a los productos chinos que se importan a los Estados Unidos "viola las reglas de la OMC" y agregó que China "defendería sus derechos".
Una reacción menos específica que México y Canadá
La reacción de China hasta ahora ha sido notablemente menos específica que la de México y Canadá, quienes prometieron rápidamente, reaccionar rápidamente con sus propios aranceles. A diferencia de China, donde los nuevos aranceles se basan en las tarifas existentes en una variedad de bienes, Canadá y México habían disfrutado previamente de una relación casi libre de deber con los Estados Unidos. Sin embargo, hay razones adicionales que podrían explicar la reacción relativamente leve de la segunda economía más grande del mundo.
La estrategia de China en la relación comercial con los EE. UU.
Beijing ha experimentado un comienzo inesperadamente cálido en el segundo mandato de Trump, que es un desarrollo bienvenido para el liderazgo chino, ya que quiere tratar de no escalar los conflictos comerciales y tecnológicos, especialmente en vista de la economía dependiente de la exportación debilitada. El jefe de estado de China, Xi Jinping, había hecho una llamada telefónica descrita como "muy buena" poco antes de la adquisición de Trump, y durante la inauguración, el representante chino más alto que haya asistido a tal evento estuvo presente.
¿El camino a un acuerdo comercial?
Las tarifas del 10% están lejos de ser más del 60% que Trump indicó durante la campaña electoral que podría recaudarlos en los productos chinos. Trump ha vinculado estas tarifas, al menos retóricamente, con el papel de los proveedores chinos en el comercio de fentanilo y no con el enorme nivel de comercio entre Estados Unidos y China. Las expectativas dentro de China indican que Trump puede esperar hasta que reciba los resultados de una investigación más completa sobre las relaciones económicas y comerciales chinas de los Estados Unidos, que encargó en su primer día de oficina en un acuerdo ejecutivo.
Mire el futuro: conflictos y medidas comerciales
La revisión realizada sobre la base del acuerdo de Trump, que se debe el 1 de abril, probablemente decidirá si la Casa Blanca plantea más tarifas contra China. Mientras tanto, Beijing tiene tiempo para construir una relación con Trump, recibirla en la capital china o exigir un acuerdo preventivo para evitar más sanciones económicas. En este sentido, el mensaje del liderazgo chino transmite un tono conciliatorio.
Preparaciones económicas de China
Los analistas dentro de China han minimizado los efectos de los aranceles del 10%, como parte de un debate más amplio, si tendría sentido que China intensifique una guerra comercial como en el primer mandato. En 2018, Trump aumentó o reintrodució los aranceles a cientos de miles de millones de importaciones chinas a los Estados Unidos, según las cuales Beijing respondió con sus propios aranceles de alrededor de $ 185 mil millones. La administración de la oferta mantuvo estos aranceles en gran medida en posición vertical, mientras que se centró en su propia estrategia comercial conocida como "pequeña cueva, valla alta".
Conclusión y Outlook
China ya ha tomado medidas para protegerse de los efectos de los aranceles que Trump describió como potencialmente dolorosos para los estadounidenses. Según los datos del gobierno de EE. UU., Estados Unidos importó $ 401 mil millones de China el año pasado, con un déficit comercial de más de $ 270 mil millones en los primeros once meses. Los medios estatales chinos informaron que las exportaciones a los Estados Unidos solo representan el 3% del PIB del país y menos del 15% de las exportaciones totales de China.
Finalmente, la pregunta es si China anunciará más homólogos comerciales en los próximos días. Sin embargo, su respuesta inicial a 10% de pulgada y las formulaciones en las últimas semanas indican que puede permanecer de manera descendente antes de que profundice en el caso del instrumento de su represalia.
Kommentare (0)